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domingo, 7 de julio de 2019

7. Jesús en el Talmud

El Talmud es una colección de escritos rabínicos, que data de los siglos III a VI d.C. y que recoge discusiones rabínicas sobre leyes judías, costumbres, leyendas, etc.  Vendría a ser, resumiendo, un gigantesco código civil y religioso a la vez.


El hecho de encontrarnos la figura de Jesús el Nazareno en este tipo de fuentes rabínicas es especialmente interesante, pues los rabinos fueron los responsables de que Jesús acabara condenado a muerte y ejecutado por los romanos, que eran los únicos que podían aplicar la pena de muerte en aquella época.
Jesús era para los rabinos, escribas y maestros de la Ley un hereje, un blasfemo y por lo tanto un enemigo espiritual.
Es por ello que no causará sorpresa encontrarnos en dichos escritos una imagen muy negativa de Jesús.
Otro punto interesante sobre la mención que hace el Talmud de Jesús es que confirman aquello que ya sabíamos por los Evangelios.

Que dice el Talmud de Jesús
A continuación me limito a enumerar las menciones que hace el Talmud de Jesús de Nazaret según aparecen recogidas en César Vidal, Nuevos enigmas históricos al descubierto. Editorial Planeta, Barcelona 2003. Páginas 30-33:
- Jesús realizó milagros, aunque los autores del Talmud los atribuyen a la hechicería. El hecho de achacar a Jesús el uso de la magia implica no sólo acusarle de que era un estafador, sino también de cometer un pecado gravísimo, pues la práctica de la hechicería implica idolatría, el peor de los pecados para un judío. Sin embargo el Talmud no está negando que Jesús cometiera prodigios, al contrario, lo admite. (Sanh 107, Sota 47b, J. Hag II,2)
- Sedujo al pueblo israelita que en parte le siguió (Sanh 43a)
- Las propias autoridades judías ejecutaron a Jesús de Nazaret colgándolo en vísperas de Pascua. (Sanh.43ª)
- Jesús se autoproclamó Dios.
- Jesús anunció que volvería una segunda vez (Yalkut Shimeoni 725)
- Se echó a perder (Talmud de Babilonia, Berajot 17b)